Aunque los reproductores de DVD y Blu-ray son dispositivos autónomos, el polvo puede entrar en la unidad y causar problemas de reproducción. Una vía de entrada de polvo es si el reproductor tiene una bandeja que se abre y se cierra para insertar y extraer discos. Otra vía de entrada de polvo son las rejillas de ventilación laterales o traseras. Para que el reproductor funcione correctamente, es importante limpiarlo y desempolvarlo con regularidad.
Antes de limpiar su reproductor de DVD o Blu-ray, asegúrese de que no haya ningún disco dentro. A continuación, desenchúfelo del tomacorriente para evitar descargas eléctricas accidentales. Si el reproductor está en un centro de entretenimiento o un mueble de TV, donde es más difícil acceder a él, desconecte los cables de la parte posterior y extráigalo.
Con un paño de microfibra húmedo, limpie suavemente la parte superior, frontal y laterales del reproductor. No utilice un paño húmedo en la parte trasera, ya que podría entrar humedad. Para eliminar el polvo de la parte trasera, utilice un paño seco o una aspiradora con accesorio para polvo. Después de limpiar el exterior del reproductor, vuelva a conectar las conexiones del televisor y enchúfelo.
Por último, abra la bandeja o inserte un disco de limpieza de lentes en el reproductor. Con el control remoto del televisor o universal, seleccione "Reproducir" y deje que el disco se reproduzca durante un ciclo de limpieza para eliminar el polvo de los mecanismos de reproducción y la lente láser. Se recomienda limpiar el reproductor de DVD o Blu-ray al menos una vez al mes.
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